Hace unos meses planté unos ajos a las bravas sin labrar el suelo, solo con un pincho. Os lo contaba aquí. Usé tres maneras: desherbando la superficie y pincho, poniendo un cartón y pincho, y sólo pincho entre la hierba.
Además, como voy cuando voy y no puedo andar mirando las lunas o esperando al mejor momento, porque igual no estoy allí, he de decir que la tierra estaba muy húmeda y con el pincho sin duda la apelmacé. Así que no tenía muchas esperanzas. Pero salieron y tenían la misma pinta que todos los ajos del lugar.
Contra pronóstico salieron. |
Ajos a punto de ser recogidos |
La verdad es que no les hecho mucho caso, desherbar y no mucho. Sobre todo alfalfa silvestre que dicen que, además, fija nitrógeno al ser una leguminosa.
La cosecha |
Ya he dicho alguna vez que por ser una apresurada echo a perder el método científico... Quería recogerlos por tramos para ver qué sistema era mejor pero al final quedaron todos mezclados y amontonados. La foto está sobreexpuesta y no se aprecian bien pero la verdad es que visto el trabajo invertido ni tal mal. Algunas cabezas son muy pequeñas y las más grandes son como las medianas que se recogen por esta zona después de haber arado y no dejando crecer ni una hierba extra.
Foto de control: El primer ajo de la izquierda es una cabeza tirando grande de siembra tradicional |
Pero recuerdo que la mayor parte de las cabezas más pequeñas estaban en la tercera zona, donde había sembrado sin desherbar y sin cartón, y las más grandes estaban en la primera zona, donde desherbé un poco.
Al sacar los ajos te das cuenta de en dónde está el fallo. Muchas cabezas han crecido dentro del agujero y están como aprisionadas. Había que tirar mucho de la planta y alguna cabeza se ha quedado dentro, en su prisión de tierra. Así que esta es mi conclusión: el agujero hecho con el pincho no deja crecer bien la cabeza, sobre todo, si además hay una fuerte cubierta herbácea que sostenga el suelo. Seguro que esto ya lo sabía todo el mundo pero yo tengo que hacer las cosas por mi misma.
El año que viene seguiré investigando esta técnica pero esta vez no va a haber agujero: voy a poner una cama de paja, los ajos y encima de ellos, más paja. Y a ver que pasa.
Al fondo la alfalfa. A los fardos no les ha sentado muy bien la intemperie. |
En la otra parte planté altramuces, girasoles y alcachofas, siguiendo la misma técnica del pincho. No salió nada de nada. Bueno sí, alfalfa. ¡Y seguro que no en los agujero que yo hice!